Jaeger-LeCoultre ha inaugurado su nueva boutique insignia en el 701 de Madison Avenue, el mismo lugar donde la empresa abrió sus puertas hace unos 10 años

Jaeger-LeCoultre ha inaugurado su nueva tienda insignia que ofrece a los clientes una visión más detallada del mundo de la relojería, la experiencia y la innovación por los que es conocida la marca.

La entrada de la boutique está situada entre dos grandes ventanales y conduce a una planta principal con techos de doble altura que difuminan los límites entre las habitaciones y está compuesta por colores naturales y materiales orgánicos como la piedra caliza y el roble, con toques de metal cepillado negro, que imitan el hogar de la marca en el Vallée de Joux. Los visitantes se encuentran primero con la «Mesa de la Artesanía», donde pueden profundizar en la historia de la firma, así como descubrir los Métiers Rares de la misma, un pequeño atelier dentro de la fábrica que se introdujo en 2016. Está dedicado a las técnicas raras de acabado, como el esmaltado, el grabado, el engaste y el guilloché.

A la derecha de la boutique, los visitantes descubren los movimientos de alta gama que fabrica Jaeger-LeCoultre, con lo más destacado de la colección actual alojado en un mostrador de exposición oval. Más allá de los mostradores, un muro de correas interactivo permite a los clientes personalizar sus relojes.

Como complemento a las diversas experiencias inmersivas, situado junto al 1931 Café, un Cabinet de Curiosités alberga una exposición de objetos que cuentan la historia de la fábrica y sus tres principales campos de excelencia relojera a través de los temas «El fabricante de sonidos», «La odisea estelar» y «El fabricante de precisión». En el centro de gabinetes, los visitantes pueden interactuar a través de una pantalla y una biblioteca de nueve vídeos educativos que han sido producidos por la maison, ofreciendo a los clientes una visión entre bastidores de los pilares de creación de la marca: diseño, producción, ensamblaje, acabado y ornamentación.

Para finalizar el rediseño, Jaeger-LeCoultre ha creado un salón VIP en el corazón de la boutique para la comodidad de sus visitantes. La boutique además cuenta con un maestro relojero que se encarga de cambiar o redimensionar los brazaletes, así como de los servicios posventa que hacen toda una experiencia única.