Rory McIlroy no pudo ganar su 5o Major y Rickie Fowler se vino abajo en la última ronda de un emotivo US Open

El debut del Country Club de Los Ángeles cumplió con las expectativas generadas previo al inicio del torneo y se convirtió en un emocionante escenario donde se coronó un inesperado nuevo campeón. Nuevamente se cumplió la maldición de que el jugador que llega rankeado número 1 del mundo no puede ganar el major en turno. De esta forma Scottie Scheffler se tuvo que conformar con el 3er lugar a tres golpes de diferencia.

Por su parte, Rickie Fowler, quien compartió el liderato a los 54 hoyos, tuvo una desastrosa ronda final de 5 sobre par para quedarse lejos de su primer major. Rickie tuvo una destacada actuación durante los 4 días del torneo, logrando establecer un nuevo récord de birdies para el US Open con 23. Sin embargo, de todos ellos sólo tuvo 2 el domingo, haciendo bogey en los hoyos 2, 5, 7, 11 y 12 quedó demasiado lejos de poder estar en la batalla por el título. Rory McIlroy inició el domingo a un golpe de distancia de Clark pero el putter no fue su mejor aliado en la ronda final, logrando sólamente embocar un birdie durante todo el día. Con una sequía de 9 años desde su último Major, parecía que el torneo se decidiría en un desempate pero Wyndham Clark tendría otros planes.

El nativo de Colorado inició la ronda con un birdie en el hoy 1, a partir de ahí tomó la delantera e hizo un para de pares milagrosos en los hoyos 9 y 11. Momentos más tarde, un par de bogeys en el 15 y 16 reducían su ventaja a tan sólo un golpe con dos hoyos por jugar. En el hoyo 17 logró recuperarse de un 2o golpe que encontró el rough a la izquierda del green y lograr un up and down que evitaría un virtual empate con McIlroy. Al salir al hoyo 18 logró colocar un drive de 324 yardas sobre el fairway para un 2o golpe de 199 yardas sobre el green y conseguir la victoria con dos putts.

Fue una victoria muy emotiva para Wyndham Clark. Al finalizar la ronda, Rickie Fowler lo abrazó y le dijo: “Tu madre estuvo contigo. Estaría muy orgullosa”. haciendo referencia a la muerte de su madre debido a cáncer de seno en 2013. La muerte de Lise Clark tuvo un efecto devastador en su salud mental. Fue su madre quien lo inició en el golf y quien lo llevaba a todos los eventos cuando jugaba en los torneos juveniles. Siempre lo apoyó emocionalmente y era quien lo aconsejaba cuando las cosas no salían bien durante sus primeros torneos en el golf colegial.

Fue durante su 2o año en Oklahoma State cuando murió su madre. A partir de ahí cayó en una espiral emocional que le impidió seguir jugando en esa universidad. Rompiendo bastones sin motivo, continuó su paso en el golf colegial jugando para la Universidad de Oregon.

Wyndham se volvió profesional en 2017, manteniendo una carrera con claroscuros sin destacar abiertamente en el PGA Tour. En 2020, jugando el Rocket Mortgage Classic, se retiró repentinamente después de hacer tres bogeys en 4 hoyos. Nuevamente, sus emociones jugarían un papel fundamental en esa decisión al abandonar el campo.

Con una renovada actitud y apoyo emocional por parte de su coach Julie Elion decidió trabajar en su salud mental y hacer un cambio, “era eso o retirarme” dijo al ganar el Wells Fargo Championship este año en Quail Hollow, su primera victoria en el PGA Tour.

Ahora tiene todo por delante, con un Major en su haber, 4o lugar en el ranking de la Copa FedEx y la confianza que brinda poder competir y ganar a los mejores del mundo, la actuación del fin de semana de Wyndham Clark sin duda se merece un Oscar.