Ansiedad y estrés… estos productos pueden ayudar a sentirte mejor
Vivimos en una época en la que hay más opciones y las expectativas son más altas que nunca. Pero aceptar que la ansiedad es una parte inevitable de la vida, es el primer paso para manejarlo
Voy recordando que en los últimos años hemos pasado de estar “estresados” a “deprimidos”, ¿y ahora? Simplemente estamos ansiosos. Muy, muy, ocupados y muy, muy, ansiosos. Los seres humanos siempre han estado ansiosos. Es una parte indispensable del sistema nervioso. Pero a medida que la vida se mueve más rápido, nuestra ansiedad se hace mayor. Entramos en pánico cuando alguien que nos gusta no nos busca de regreso en Bumble, porque nuestro feed de Instagram no es tan atractivo como el de los demás. Estamos viviendo en una era de solipsismo. Nunca antes habíamos sido tan consumidos con la examinación, la superación personal y la autoperfección.
Nuestros modelos no ayudan. Estamos rodeados de excesos, figuras públicas que pueden hacerlo todo. Ser una madre inspiradora, vestir ropa de moda, ser capaz de hacer 20 lagartijas “adecuadas” y hacer una cena digna de reels ya son obligaciones cotidianas. Nuestras opciones en la vida son infinitas, la capacidad de tomar una decisión rápida se ha convertido en una habilidad esencial. ¿El resultado? Los ataques de pánico – un resultado de nuestras propias inseguridades- pensamientos de que no somos lo suficientemente buenos o que estamos fallando. Un pequeño desliz nos envía en una rápida caída en espiral descente que nos lleva a sentir ansiedad.
La ansiedad es una cortina de humo para los temores profundos y las alarmantes estrategias de adaptación del día a día. Observando que nuestra cultura trata la ansiedad cotidiana como un problema que debe arreglarse. Pero, recordemos que está bien, el no estar bien.
El problema: La ansiedad es una parte normal de la vida, y si tratamos de deshacernos de ella, la estamos tratando como si fuera una amenaza. La ansiedad primaria (en otras palabras, inevitable) conduce a la ansiedad secundaria. Esencialmente, se está pòniendo ansioso por el hecho de que estamos ansiosos.
La causa: Una causa secundaria de la ansiedad es el “enmes-hment/enredo”. El cuál es un término de la terapia familiar que describe la falta de límites personales y una incapacidad para hacer frente a la propia angustia o a la de otros. Cuando consideramos que nuestra respuesta a la ansiedad está determinada por cómo vemos a nuestros padres tratar con nuestra ansiedad, tiene sentido. Un ejemplo, es si la tripulación de cabina durante la turbulencia, si parecen relajados, nos relajamos. Si están en pánico pensamos que algo terrible esta por suceder.
La solución: Descubre que está bien estas ansioso. “Haz espacio para el inevitable sufrimiento a través de una práctica diaria de atención plena, meditación, reiki o yoga. Podemos aprender a manejar nuestras emociones en lugar de evitarlas.
En resumen, el mantra que debes adoptar para ti y para los demás es: Yo entiendo que estás sufriendo -admítelo, reconócelo-. Aprende a ser amable contigo mismo. Trata la ansiedad como parte de tu realidad, no como una amenaza. La ansiedad solo se puede controlar cuando se ve como el enemigo, luchar contra ella y tratar de ganar.
Aquí te proporcionamos una lista con algunos productos que te ayudaran a relajarte y bajar la ansiedad causada por estrés.
Aceite aromático peace of Mind, de Origins
Aceite para el cuerpo relajante, de Aveda
Veladora de Momiji
Tónico corporal de Clarins
Difusores con aromas rellanares de Mys