Emociones desde el primer green

Hideki Matsuyama inició la jornada final en el liderato, con cuatro golpes de ventaja, sin embargo, en el hoyo 1 cometió bogey, que combinado con un birdie de Will Zalatoris en ese mismo hoyo, se redujo a dos impactos. A continuación dejó a un lado de la presión, y con birdie en el hoyo 2, mantuvo a raya a Will Zalatoris, quien se anotó otro birdie, también en la bandera 3, con bogey en el hoyo 3.

Hideki Matsuyama jugó en par los greens 3 al 7, manteniendo la superioridad por tres golpes. En el hoyo 8, Will Zalatoris y Hideki Matsuyama acertaron birdies, pero en la siguiente bandera —la novena— el japonés encontró un birdie, para aumentar su superioridad en cuatro impactos, que creció a cinco, con el bogey de Will Zalatoris en el hoyo 10.

En el hoyo 12, Hideki Matsuyama cometió bogey, y se colocaba 12 bajo par, con ventaja de cinco golpes sobre Jordan Spieth, Xander Schauffele y Will Zalatoris. En la bandera 13, Hideki Matsuyama tenía suerte, al impactar su tiro de salida en un árbol, la cual retornó al fairway, para sacar un birdie.

Dificultades al final

En el hoyo 15, Hideki Matsuyama se fue al agua, para anotarse un bogey, combinado con cuatro birdies de Xander Schauffele entre los hoyos 12 y 15, permitieron a Xander Schauffele aproximarse al liderado a dos golpes. Todo indicaba que el título se decidiría en los últimos tres greens.

Totalmente desconcentrado, Hideki Matsuyama falla en el hoyo 16, par 3, con bogey, y le dejó a Xander Schauffele la posibilidad de acercarse a la pelea por el campeonato, pero Xander Schauffele arriesga de más y deja su tiro en el agua, y ahí se hundieron sus esperanzas de coronarse, al cometer triple bogey. Hideki Matsuyama jugó el último hoyo en bogey, para conquistar el torneo, con 278 golpes, -10, uno de ventaja sobre Will Zalatoris.