Desde las altas tierras escocesas llegó Glenfiddich Grand Cru, un Single Malt que reúne lo mejor de dos mundos: un whisky único, añejado durante 23 años, con un reposo final en barricas de roble francés cuvée, donde alguna vez se resguardaron vinos espumosos.
s así como Glenfiddich, el Single Malt más premiado del mundo, pone a prueba los paladares de los conocedores y desafía los convencionalismos en cada sorbo de Glenfiddich Grand Cru. La experiencia de disfrutarlo sensorialmente resulta única: en cada vaso se distinguen los sabores, así como los evocadores y finos esencias de la maduración, combinados con su tonalidad ocre, que reflejan el cuidado de más de dos décadas de añejamiento.
Explosión sensorial
Como resultado de los seis meses de añejamiento en las barricas de roble francés cuvée, cada gota de Grand Cru acumula aromas y sabores únicos.
Al final, llegan a los sentidos diferentes fragancias, que van desde la flor del manzano hasta el limón confitado y pan recién horneado. En boca se recibe una explosión de gustos, que va desde la deliciosa vainilla, el dulce pan brioche, el sándalo, el sorbete de pera y la uva blanca, en una armonía de sabores. Lo anterior está realzado por un final largo y opulento para concretar una experiencia inolvidable para ser compartida y recordada.
“Este nuevo whisky es el resultado de la pasión por crear líquidos exquisitos y desafiantes, lleva el sello de calidad e innovación asociado con la marca y es un verdadero testimonio de nuestro innato espíritu inconformista”.
Christiano Protti, embajador de Glenfiddich en México
Durante la presentación y degustación de la nueva etiqueta, Brian Kinsman, Malt Master de Glenfiddich, comentó que en esta ocasión la marca quebró las reglas de lo establecido, al experimentar y encontrar los tiempos óptimos de maduración y acabado. Con ello se logró un equilibrio entre las barricas Glenfiddich de 23 años y los barriles franceses donde se resguardaron vinos espumosos.
Por su parte, Christiano Protti, embajador de Glenfiddich en México, explicó que crearon una combinación única con las barricas de vino espumoso, ideal para las celebraciones, que le aportaron sustancia y suavidad al Single Malt.
Esto se disfruta en cada sorbo de Grand Cru, donde se mezclan la tradición y la innovación.
Lujo integral
La presentación de Glenfiddich Grand Cru incluye una lujosa caja negra con un brillante diseño de fuegos artificiales dorados; la botella, diseñada en vidrio negro, luce con orgullo un estampado dorado Grand Cru.
Esta variante de Glenfiddich ya se encuentra disponible en México a través de ventas por e-commerce, dispuesta a conquistar los paladares más exigentes y sofisticados.
1887
fundación de Glenfiddich, en Escocia
23
años de añejamiento