Por su diseño sobre los acantilados de la montaña Lookout y en medio del bosque, el golfista tiene la sensación de estar jugando sobre las nubes. Luego de una laboriosa remodelación —con duración de un par de años—, está convertido en uno de los mejores campos de golf de Georgia.

Los constantes cambios de elevación, tanto de mesas de salida como en la colocación de los greens, resultan un reto, especialmente la bandera del 18, considerado el hoyo insignia.

Por su ubicación en las alturas, durante el recorrido, el jugador tiene la oportunidad de admirar las espectaculares vistas del valle. La casa club cuenta con todos los servicios, incluido el restaurante The Creag y el bar Bier Garden. Para una rápida ronda, el desarrollo cuenta con The Cairn, un campo ejecutivo de seis hoyos.

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